Los detalles de la boda de Sara Corrales y su pareja

Sara Corrales y su pareja Damián Pasquini se casaron este jueves por lo civil en Colombia. Pero su gran boda, esa que contará con 150 invitados y en la que la actriz colombiana lucirá tres espectaculares vestidos, tendrá lugar este sábado 16 de agosto. Con Sara y Damián hablamos de este día tan especial en sus vidas que ya se acerca y de cómo surgió su historia de amor. 

¿Se van a casar por la iglesia? 

Sara: Va a ser una ceremonia espiritual. Los dos conectábamos mucho más con esta corriente. Estuvimos investigando al inicio de qué forma nos gustaría casarnos y se nos hizo más coherente con nosotros, con nuestra forma de pensar y de ver la vida. Conseguimos a una persona increíble que va a hacer unos rituales especiales llenos de amor que los dos elegimos. 

¿Por qué eligieron casarse en Colombia? 

Damián: Nosotros vivimos en México desde hace muchos años. Sara más de 13 años, yo casi ya 19, entonces una opción era hacerlo aquí. Pero después surgió la idea de hacerla en Medellín y la verdad que nos convenció y estamos supercontentos con esa decisión. Argentina la verdad que no fue una opción. Hubiera sido mucho más complicado hacer viajar a tanta gente para Argentina, que igual sí es un país que recomiendo que vayan y que es hermoso, pero hacerlo allá en Argentina no era opción. Medellín creo que es, sin duda, la mejor opción y cada vez que voy a Medellín la verdad que me gusta más también. 

Sara Corrales y su pareja Damián Pasquini.

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¿Cuántos vestidos vas a lucir, Sara?

S: Voy a lucir tres vestidos: el mero, mero de novia, después tengo uno diferente y después tengo un corto como para la fiesta.

¿Cuántos invitados habrá? 

S: 150 invitados de diferentes países porque obviamente va a ir gente de Argentina, de México, de Colombia obviamente, de Estados Unidos, de España, de Australia…

Hablemos de su historia de amor, ¿cómo se conocieron? ¿Quién dio el primer paso?

D: Yo creo que el primer paso lo dio ella porque ella fue la que me escribió. Pero nos compartieron los ‘WhatsApp’ por amigos que decían que nos teníamos que conocer. Ese día [que nos escribimos] salimos a cenar y desde ese día prácticamente que empezó todo ahí. Desde la cena número 1 ya hablábamos de casarnos. 

S: Sí. En ese momento era divertido y era chistoso hablar del tema, pero yo creo que los dos en el fondo sentimos algo tan especial que nos fluyó el tema desde el primer día. Sentíamos una conexión muy especial. 

Damián, ¿conocías quién era Sara? ¿Habías visto su trabajo?

D: No, no la conocía hasta ese momento. Evidentemente cuando empezamos a hablar enseguida me di cuenta de que tenía una trayectoria y preferí, sabiendo de que no conocía su otro lado, primero darme la oportunidad de conocerla como persona porque creo que estaba interesante descubrirla de esa manera y después ya fui descubriendo su otra faceta digamos como de persona reconocida o famosa. Ella no me cree, cree que la googleé desde el principio y la verdad no porque aparte empezamos a hablar y a las 8 de la noche fuimos a cenar, entonces yo estaba más preocupado para ver dónde íbamos a cenar, cómo arreglaba todo, que por ponerme a investigar cuál había sido su trayectoria. Sí claro me enteré, porque nos compartimos Instagram y esas cosas, que era una actriz colombiana reconocida, pero no sabía nada más. 

S: Viéndolo bien a mí me parece mejor que haya sido de esa manera porque él no fue como esperando encontrarse con la actriz, con la famosa, sino con Sara simplemente, una chica que le llamó la atención y eso lo hizo más genuino y como más inocente el encuentro. 

Damián no sé si previamente habías salido con alguien del medio, pero ¿cómo has llevado el que Sara se dedique a esto y sea una persona conocida?

D: Yo me dedico desde hace muchos años a la industria de la publicidad, entonces sí me ha tocado convivir, independientemente de salir o no, con personas que son reconocidas. Uno se da cuenta que al final alrededor de eso hay un aura superinteresante de la gente que se destaca, pero también son personas y cuando las tratas, cuando hablas, cuando vas a comer, cuando caminas por la calle –más allá de que la puedan parar a tomarse una foto–, son personas normales. Obviamente hay algunas más sencillas que otras. Algunos me preguntan: ‘Y que cuando actúa y que si se besa’. Eso yo entiendo perfecto que es parte de su trabajo y no te puedo decir que me molesta, lo entiendo y lo acepto desde el principio. Algo que tenía ciertas dudas o prejuicios antes de esa primera cena era que sea este tipo de personas que no son lo sencillo con lo que igual yo me identifico o me siento cómodo. Pero Sara es una persona supernormal y aterrizada y es parte de lo que hace que el día a día sea increíble y seamos una pareja normal, más allá de que su trayectoria la hace ser una persona pública. Lo cual me ha resbalado un poco a mí. Hay gente que dice: ‘Tú eres famoso’. Digo: ‘Yo no soy famoso, en todo caso la que es famosa es mi mujer’. Si salgo en algunas de sus publicaciones o lo que sea hay alguien que me puede llegar a reconocer, pero me reconocen nada más como el novio de y con eso yo no tengo ningún problema. 

S: Yo voy a hacer un paréntesis porque él es muy sencillo. Sí, sí había salido con algunas famosas y muy guapas porque el hombre era muy apetecible, sigue siendo muy apetecido solo que ya se cerró la puerta. Y eso me encanta, me encanta porque de verdad sí es un hombre no solamente muy guapo, sino muy inteligente, excelente conversador, trata divino a las mujeres, a los seres humanos en general. Yo la verdad soy cero celosa y eso creo que es algo hermoso de nuestra relación, que a los dos nos gusta ver al otro brillar. A mí me encanta que lo admiren, que le digan que hermoso o que me digan: ‘Sara qué guapo novio tienes’. Me encanta porque yo estoy seguro de él y él está seguro de mí. Los dos estamos muy seguros de la relación que tenemos y de la persona que tenemos al lado. 

Sara, ¿qué es lo que más destacarías de Damián? 

S: Lo que me llamó la atención de él fue lo auténtico que fue. Creo que hasta tuvo que ver algo de que él no supiera quién era yo porque eso lo hizo ser muy genuino. Normalmente cuando los hombres se acercaban ya venían o nerviosos o predispuestos o queriéndome deslumbrar con cosas que no era por ahí y eso hacía que no conectara. Él vino de una manera tan transparente, tan divertido que eso me cautivó demasiado. Y yo creo que el humor. Desde el inicio en nuestro chat las dos primeras palabras ya fueron divertidas. Todos los otros hombre antes eran como con miedo, entonces aquí desde el inicio fue especial. 

Sara Corrales y su pareja Damián Pasquini.

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¿Cuáles son sus planes después de la boda?

D: Otra luna de miel yo creo. 

S: (Ríe). Efectivamente, tanto amor requiere dos lunas de miel. 

D: Muchos. Ya ha sido público también que nos interesa formar una familia y quedar embarazados, entonces posterior a la boda queremos como enfocarnos un poquito y concentrarnos en eso. Después también hay proyectos profesionales juntos que ahí están tomando forma. La boda nos está absorbiendo, nos está sacando mucho foco, pero también por elección, entonces hay cosas que hemos dejado un poquito al costado. 

¿Tienen otra luna de miel planeada?

S: Nuestra gran luna de miel, o sea el viaje grande que fue de un mes, por supuesto fue del que ya te hablamos, pero tenemos otro viaje posterior a nuestra boda. Es algo que había sido un sueño para mí durante muchos años y que tenía ahí en mi lista de cosas por hacer y es irnos a Burning Man. 

D: Es interesante salir de todo lo mágico que vamos a vivir en la boda e irnos al medio del desierto a vivir una experiencia como pareja increíble. Allá también nos vamos a casar, vamos a hacer una segunda boda y si hacemos una segunda boda por qué no tener una segunda luna de miel, pero bueno eso ya será más adelante (ríe). Es un viaje como para cerrar. No es una luna de miel como tal, es como para cerrar todo esto. La luna de miel, el viaje importante, fue el que acabamos de hacer, que fueron casi 40 mil kilómetros, casi un mes de viaje. La verdad que viéndolo también en retrospectiva creo que está bueno. La tradición dice que hay que hacerlo después de la boda, pero creo que estuvo bueno hacerlo un par de meses antes. Fue un viaje de mucha conexión. Nosotros ya vivimos juntos, casi al mes que nos conocimos ya vivíamos juntos, entonces no es que fuimos a ver cómo nos llevábamos conviviendo, pero fue un viaje que por muchas cuestiones nos llevó más allá y nos hizo también estar mucho más cerca. Entonces desde ese punto de vista creo que es interesante pensar que la luna de miel antes de la boda tiene sentido. Todos los viajes tienen sentido. Nosotros somos fanáticos de viajar y nos encanta. Por eso queremos como cerrar volviendo de Medellín e irnos una semanita al desierto de Nevada y después regresar y, como te decíamos, poner en marcha los proyectos que tenemos ahí pendientes. 

Para finalizar, quiero que se miren a los ojos y que cada uno le agradezca al otro algo…

S: Te lo digo todos los días, vivo sumamente agradecida contigo por sencillamente haber aparecido en mi vida, por ser la persona más especial que ha llegado a mi vida, por llenarme de risas, de alegrías, de momentos, de experiencias, por amarme, por respetarme. (Se emociona). Por amar a la Sara que soy en todas sus facetas, en todos sus moods y por hacerme la mujer más feliz del planeta. 

D: Yo te quiero decir que yo no creía que un amor tan increíble, tan puro, tan complementario con el que te sume, con el que te haga pensar que la vida es mucho más hermosa de dos, era posible y te quiero agradecer por demostrarme que estaba equivocado. 

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